Para unas vacaciones relajantes en pareja o en familia, le seducirá esta casa rural habilitada en un antiguo molino de piedra de toba del siglo XVII, restaurado con materiales tradicionales, en un entorno natural pintoresco y preservado.
Para unas vacaciones tranquilas en pareja o en familia (6 personas), se trata de una encantadora casa rural habilitada en un antiguo molino del siglo XVII de piedra de toba y restaurado con materiales tradicionales. Los muebles antiguos, las vigas a la vista, las chimeneas de piedra, le dan un ambiente auténtico y cálido. El río que antiguamente alimentaba el molino atraviesa la casa rural, lo que hace que el lugar sea especialmente singular y encantador. Podrá relajarse junto al agua en este magnífico rincón de naturaleza totalmente preservada, o ir a descubrir los atractivos de la región. Un río de primera categoría serpentea por los terrenos y hará las delicias de los pescadores. Otra casa rural totalmente independiente (12 personas) está disponible para alquilar en la propiedad.