El águila real cocina sutil y gourmet

Se da mucha importancia a los productos de temporada y a todo lo que puede aportar el terroir local. Así, el manjar blanco se acompaña de un tartar de fresas del municipio vecino, una crema con safran de Touraine igualmente local, todo ello aromatizado con hierbas y flores comestibles del jardín del restaurante. Como el mar no baña Touraine, el Chef recurre a proveedores de la costa atlántica (no está lejos…) para servirnos platos sabrosos perfectamente ejecutados. Para abrir el apetito: un amuse bouche de taramosalata de coral de vieira, salsa cajún y galleta de sarraceno y, para el plato principal, cigalas de nuestras costas, gelatina de brócoli vegetal, rillettes de cangrejo y mousse de cebolla caramelizada… ¡En nuestro último almuerzo, mis invitados y yo quedamos absolutamente conquistados! Casi la misma emoción que durante nuestra comida en Arbore et Sens… Todo el menú, desde los entremeses hasta los postres, era gourmet, armonioso, cocinado a la perfección y regado con salsas y jugos que no dejaban ni una gota en el fondo del plato!

El restaurante cuenta con dos acogedores salones y una frondosa terraza con capacidad para unos 30 comensales. El comedor principal cuenta con una decena de mesas bien espaciadas. Calentado por una chimenea de leña en invierno, el ambiente atemporal invita a compartir momentos íntimos con la familia, los amigos o los enamorados… En el lado del jardín, una segunda sala, más familiar, tiene un aire chic y bucólico. Es ideal para eventos privados, personales o profesionales. Cuando hace buen tiempo, se puede aprovechar el jardín cerrado y florido, escondido detrás del edificio, muy apreciado por los conocedores de la casa. Ofrece un marco natural y tranquilo para disfrutar de un momento de gastronomía en el Valle del Loira.