Manger un phoque (Cómete una foca) aborda de frente la rebelión de la imaginación en una sociedad donde el deseo está congelado.
Manger un phoque es una historia magnífica y sensible que dará calor a la pregunta: ¿hay un futuro mejor?
Manger un phoque es una historia magnífica y sensible que dará calor a la pregunta: ¿hay un futuro mejor?
Manger un phoque (Cómete una foca) aborda de frente la rebelión de la imaginación en una sociedad donde el deseo está congelado.
Manger un phoque es un relato magnífico y sensible que dará calor a la pregunta: ¿hay un futuro mejor?
Cuenta la historia de Picot, un niño de nueve años, su hermano, su hermana, unos animales salvajes que se han escapado de un zoo, un conductor ruso que una vez se comió una foca y una anciana asiática que está perdiendo la memoria.
Todos ellos se enfrentan al dolor, a la precariedad, a la emigración, a un futuro que se prevé triste y desesperanzador, y a la fantasía como precioso bálsamo.
Un viaje onírico hacia la alegría.
Manger un phoque es un relato magnífico y sensible que dará calor a la pregunta: ¿hay un futuro mejor?
Cuenta la historia de Picot, un niño de nueve años, su hermano, su hermana, unos animales salvajes que se han escapado de un zoo, un conductor ruso que una vez se comió una foca y una anciana asiática que está perdiendo la memoria.
Todos ellos se enfrentan al dolor, a la precariedad, a la emigración, a un futuro que se prevé triste y desesperanzador, y a la fantasía como precioso bálsamo.
Un viaje onírico hacia la alegría.